El campo de prácticas es un lugar ideal para trabajar en
todos los aspectos de su juego. Cada día observo en mi campo a muchos socios
trabajando en algún aspecto de su swing, y me encanta. Están intentando mejorar
en todas las partes básicas del swing de manera que luego puedan confiar en él
cuando están jugando en el campo. Los palos de golf que use también son importantes a la hora de conseguir un buen swing.
Pero ¿qué ocurre cuando ya está en el campo, jugando con su
swing habitual, y las cosas empiezan a ir mal? No tiene por qué resignarse a
llenar su tarjeta de números altos y volver a casa con una cara amargada. Y
tampoco tiene por qué esperar a su próxima sesión en el campo de prácticas para
trabajar los defectos del swing que ha encontrado a la hora de la verdad.
Así que para solucionarlo de un plumazo he reunido mis
consejos favoritos para trabajar su swing en el campo, pequeñas píldoras de
información que le pueden poner en el camino correcto en 10 segundos o menos.
No son consejos que le vayan a hacer un lío en la cabeza. Se pueden llevar a
cabo sin esfuerzo, y pueden llegar a ser una parte muy importante para manejar
su juego, de forma correcta desde el tee de salida, en la calle, en el búnker o
alrededor del Green.
1. Sujete el
putter en los dedos y no en la palma
Al sujetar el putter por los dedos, antes que con las palmas
de las manos, se incrementará inmediatamente la sensación que experimenta la
cabeza del palo y, con ello, su habilidad para calcular la distancia en los
golpes. También reducirá la presión sobre la empuñadura, lo que permite que el
palo discurra por el swing de forma natural.
Conseguirá un contacto más sólido
y consistente en los putts largos, y soltará la cabeza del palo de forma
efectiva en los putts cortos. ¿Por qué es esto importante? Porque la mayoría de
la gente empuja la cabeza del palo hacia la izquierda (los zurdos hacia la
derecha) en los putts cortos en vez de usar un “swing” más corto. De esta forma
podrá confiar más en sus putts.
2. Colóquese a
la derecha cuando el peligro está en ese lado
Si los problemas se extienden en el lado derecho de la calle,
empiece por colocarse todo lo que pueda a la derecha del tee. Pero no es
cuestión de colocar la bola en ese lado y pegarle. Visualice el vuelo
predominante de su bola, y luego elija un punto en la distancia que represente
la curvatura máxima de la trayectoria.
Después, seleccione un objetivo a un
metro por delante de la bola. Alinee ambos puntos y use esa línea como la línea
de objetivo. La última parte es la más difícil: péguele sin miedo. Concéntrese
en el proceso de apuntar y piense sólo en un objeto específico.
3.
Colóquese a
la izquierda del tee cuando no puede fallar por ese lado
Si el peligro está en el lateral izquierdo del hoyo,
colóquese primero en el lado izquierdo del tee de salida. No tiene por qué
pararse en la marca del tee. Mientras la bola se encuentre las marcas del tee,
su cuerpo sin embargo, puede permanecer fuera de ellas, asegúrese sólo de que
el terreno esté nivelado.
Ahora, realice los mismos cálculos que cuando quiere evitar
los problemas del lado derecho del hoyo: visualice el punto máximo de
curvatura, y apunte hacia él. Golpee sin miedo.
4.
¿No tuvo
tiempo de calentar?
Con el poco tiempo que tenemos hoy en día, casi siempre
llegamos tarde a todos los sitios. Pero el peor lugar al que puede llegar con
el tiempo pegado a los talones es a un campo de golf. Se rompe el ritmo, afecta
de manera negativa a su actitud y, más aún, genera tensión en los brazos y
manos provocando un vuelo errático de la bola.
Si no puede calentar antes de jugar, practique este atajo:
realice los swings de prácticas de forma suave y con los brazos relajados, y
cuando lleve el palo hacia delante vuelva a doblar las muñecas lo antes
posible.
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